REVOLUCIÓN FRANCESA

jueves, 3 de noviembre de 2011

LA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL. CAMBIOS EN LA EUROPA DEL SIGLO XVIII-XIX

TEMA 3 LA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL

 
  1. ¿Qué fue la Revolución Industrial?

DEF: “Transformación radical de los modos de producción industrial producida a partir de la segunda mitad del siglo XVIII. Causado por la aplicación de máquinas  al proceso productivo y la aparición de las primeras fábricas”. A este fenómeno se llama 1ª Revolución Industrial.

  1. Causas de la Revolución Industrial
La causaron transformaciones producidas en distintos campos y que ya vimos en el tema del Siglo XVIII: (volver a releer)
  • Agrarias.
  • Demográficas
  • Técnicas
  • Comerciales.

  1. Consecuencias de la Revolución Industrial
La mecanización de las tareas, la aparición de fábricas o la  producción para la venta causada por la revolución industrial, tuvieron consecuencias:
  • La producción creció mucho.
  • Las ciudades se multiplicaron y aumentaron su población.
  • Se pasó de una sociedad agraria a una sociedad industrial.

El proceso de industrialización es diferente en función de cada país o época en el que tuvo lugar. La Primera Revolución Industrial comenzó hacia 1760, la Segunda, hacia 1870 y la Tercera, se está dando en la actualidad.

  1. Orígen de la Revolución Industrial
La Revolución Industrial se inició en Gran Bretaña en el último cuarto del siglo XVIII a causa de:
  • El fuerte crecimiento demográfico:, causado por el descenso de la mortalidad. A su vez, ese crecimiento provocó un aumento de la demanda (de productos agrícolas e industriales) y la existencia de más mano de obra.
  • La revolución agrícola: Las transformaciones en la agricultura permitieron alimentar a más población y mano de obra agraria sobrante, que emigró a las ciudades a para trabajar en las fábricas.
  • La riqueza de los recursos minerales: Inglaterra poseía abundante carbón, necesario para mover las máquinas de vapor, máquinas imprescindibles en las primeras fábricas.
  • Ampliación de mercados para sus productos: Inglaterra poseía buenas comunicaciones y las colonias americanas suponían  un amplio mercado.
  • Una nueva mentalidad: En Inglaterra se había desarrollado una burguesía diferente a la del resto de Europa, más abierta a invertir y arriesgarse en busca de beneficios.

  1. La Revolución Industrial en Gran Bretaña:
Gran Bretaña fue la primera potencia industrial. Las innovaciones  se centraron en dos industrias concretas que, gracias a ello se desarrollaron enormemente:
    • La industria textil del algodón.
    • La industria siderúrgica.
El desarrollo industrial fue posible gracias a la invención de la máquina de vapor por James Watt, que se aplicó a la minería, la industria y al transporte. La fuente de energía usada, el carbón, era abundante en Gran Bretaña, aunque  generó mucha contaminación en las zonas industriales.

  1. La Revolución Industrial y los transportes.
La Revolución Industrial creció rápidamente, pero para ello fue también necesario que se produjese una revolución en los transportes que diera salida a la abundante producción industrial. Fue el momento en que se transformaron dos medios de transporte : barco de vapor y el ferrocarril.
  • Barco de vapor:  El estadounidense Fulton abrió la primera línea comercial marítima con barcos de vapor. La técnica se fue aplicando a este medio: Empleo de cascos de hierro, hélices para la propulsión, incorporación de máquinas frigoríficas…
  • El ferrocarril: En 1814 Stephenson construyó la primera locomotora de va por para trabajar en las minas. Poco después, en 1825, se inauguraba la primera línea de ferrocarril para mercancías de Inglaterra, y en 1830 la primera para pasajeros (Liverpool-Manchester).

Toda esta revolución en los transportes mencionada, generó un fuerte impacto económico ya que:
  • Las mercancías europeas cada vez llegaban más lejos.
  • Aumentó la producción de hierro y carbón.
  • Cambiaron la vida cotidiana de los seres humanos: al permitir mejorar la dieta y hacer más fácil es trasvase (migraciones) de población de unos lugares a otros.
 
  1. Difusión de la Revolución Industrial
Entre el comienzo del siglo XIX y 1870 las innovaciones de la Revolución Industrial se extendieron por Europa y, un poco más tarde, por EE.UU. y Japón.
  • Europa: En el continente  la industrialización se produjo, sobre todo desde 1815, cuando vencido Napoleón, se desarrollaron las actividades económicas y se restablecieron los contactos con Gran Bretaña, que exportó sus máquinas, tecnología y especialistas. El desarrollo industrial fue muy intenso en Alemania, Bélgica  y Francia, mientras que en el resto de los países europeos quedó limitada a zonas geográficas muy concretas dentro de cada país (por ejemplo, Cataluña en España).
  • EE.UU.: El gran crecimiento industrial se dio a partir de 1830. Tres elementos fomentaron el desarrollo económico: la construcción del ferrocarril, la expansión y colonización del oeste y la escasez de población (potenció la mecanización)
  • Japón: Aunque se mantuvo hasta 1867 dentro de una economía tradicional, a partir de la fecha mencionada el emperador inició una serie de reformas que permitieron avanzar la tecnología e industria. Se conoce como “la era meijí” o “el Japón meijí” a esa época a partir de 1867 en que junto a una sociedad y costumbres ancestrales, se aceptó la tecnología y los avances occidentales, e incluso formó técnicos en universidades europeas. Así, Japón se convirtió en una de las principales potencias mundiales.

  1. El desarrollo de las Sociedad Anónimas y la banca
Al comienzo de la Revolución Industrial la mayor parte de las empresas eran pequeñas y familiares. El capital pertenecía a una persona o a una familia, pero, conforme avanzó el siglo XIX, fueron creciendo de tamaño. Por ello, cada vez fue más necesario mayor capital para abrir una. Así surgieron las sociedades anónimas (para reunir el dinero necesario). En ellas el capital de una empresa se divide en acciones (participaciones) que se compran o venden en la bolsa. De ese modo las empresas obtenían financiación sin tener que pedir préstamos bancarios. Paralelo al desarrollo de la revolución industrial nacieron los bancos modernos, que utilizaban los ahorros de sus clientes para invertir en industria y negocios.

  1. La Segunda  Revolución Industrial
A partir de 1870 se produjeron nuevas transformaciones en la economía mundial que se conocen como Segunda Revolución Industrial. Estas innovaciones consistieron en:
  • Dos nuevas fuentes de energía, superada ya el carbón y la máquina de vapor: la electricidad y el petróleo (cuyo uso masivo se dio en el siglo XX).
  • Nuevas industrias: Aunque se mantuvieron la textil y la siderúrgica, con las adaptaciones tecnológicas lógicas, tres fueron los sectores que despegaron ahora:
La industria eléctrica, que revolucionó el alumbrado (la bombilla venció al gas), el transporte (ferrocarril, metro y  tranvía eléctricos) y las telecomunicaciones (telégrafo, teléfono, radio).
La industria química: Impulsada por la creación de nuevos productos tales como los abonos, artículos sintéticos (tintes y colorantes artificiales), explosivos o productos farmacéuticos.
El sector siderúrgico: Progresó enormemente con la invención del horno Bessemer, capaz de producir grandes cantidades de acero a bajo precio. El acero transformó la industria naval  y la de armamento,  así como la arquitectura y la ingeniería.
  • Nuevos medios de transporte: Cambios transcendentales al aparecer el automóvil y el avión, de enorme desarrollo en el siglo XX.
  • Nuevos sistemas de producción y venta: El ingeniero Taylor, dividió el trabajo en tareas pequeñas.  Cada obrero se especializaba en una tarea (división del trabajo) y recibía un salario proporcional a la labor realizada. El trabajo se volvió más eficaz pero, a la vez, era más mecánico y monótono. Más tarde, el empresario Henry Ford inventó la cadena de montaje (fordismo), que evitaba los tiempos muertos entre unas tareas y otras. Con estos dos cambios mencionados, aumentó la producción y los precios se redujeron.





  • Nuevas empresas: más grandes, que controlaban los mercados y concentraban las distintas empresas de un mismo sector (trust y holdings) para monopolizar la producción y acabar con la competencia.
  • Nuevas formas de venta: Aparecieron los grandes almacenes y la publicidad.
Nuevas potencias: Entre 1865 y 1914 Gran Bretaña siguió siendo la primera potencia del comercio mundial, pero dejó de serlo en la industria. EE.UU. y Alemania desarrollaron las nuevas industrias de tal forma que en 1914 Estados Unidos era la primera potencia agrícola y Alemania se puso a la cabeza de las in

No hay comentarios:

Publicar un comentario